El consumo de azúcar en el mercado interno vuelve a estar bajo la lupa del sector sucroalcoholero. Según las perspectivas privadas, la comercialización en el país de este producto podría cerrar otra vez con una baja este año, con respecto a los valores históricos, pese a los indicadores de los últimos meses que reflejaron una mejora.

Los industriales han puesto atención en el consumo como uno de las variables que han impactado en las diferentes zafras, incluyendo la campaña 2025. De acuerdo con los registros del sector, el consumo interno en los últimos años rondaba las 1,37 millón de toneladas anuales. Sin embargo, en 2024 se habría producido una caída del 8%, con un consumo estimado en 1,26 millón de toneladas. Las causas de este retroceso fueron múltiples, aunque dos razones resultan clave, señalaron en el Centro Azucarero Argentino (CAA).

Por un lado, en 2023 la industria que utiliza azúcar como insumo hizo una previsión de stock, empujada por la alta inflación. Esa sobreacumulación tuvo un efecto directo en 2024: el consumo visible bajó porque las industrias se abastecieron de lo ya acopiado, sin necesidad de nuevas compras en el mercado.

A esto se sumó otro facto inevitable: la retracción general de la actividad económica, que impactó en distintos ámbitos productivos y de compra de las familias, y redujo la demanda efectiva.

A pesar del panorama anterior, los primeros meses de 2025 comenzaron a marcar un cambio de tendencia. Los datos relevados entre abril y mayo mostraron señales de recuperación. Seguramente, influyó una menor presión de stocks acumulados, a diferencia de lo ocurrido el año pasado.

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En ese marco, se espera que el consumo total de azúcar durante este año se ubique en torno a las 1,32 millón de toneladas, lo que significaría un repunte de casi un 5% respecto del año pasado, aunque un descenso de casi un 4% con relación a los periodos anteriores.

Esta previsión del consumo se sustenta en los relevamientos de existencias realizados periódicamente entre los ingenios, los principales cañeros y los operadores comerciales. Es decir, la oferta está muy atomizada.

Alcohol

Los empresarios realizan una lectura cauta, pero optimista, de la campaña, especialmente al tener en cuenta las expectativas de exportaciones y la producción nacional de alcohol.

El Centro Azucarero Argentino destacó un incremento interanual de un 17,6% en la producción de alcohol, de acuerdo con la información proporcionada por los ingenios del país hasta el pasado 5 de julio.

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En ese período se elaboraron 132,1 millones de litros, frente a los 112,3 millones del mismo lapso de 2024.

La entidad también subrayó un aumento de un 8,5% en la producción de azúcar físico y de un 8,7% en la molienda de caña.

En Tucumán: la campaña, en números

Según datos del Instituto de Promoción del Azúcar y Alcohol de Tucumán (Ipaat), hasta el 9 de julio se molieron en Tucumán 6,2 millones de toneladas de caña bruta, un 14% más que en el mismo período de 2024. La producción de azúcar físico alcanzó las 394.502 toneladas, con predominio del azúcar blanco tipo A. Además, la elaboración de alcohol hidratado creció un 17%, con más de 95 millones de litros producidos por 10 destilerías en 75 días de actividad.